Tener el gran horno para disfrutar de una pizza casera no es necesario, si tienes un sartén y algo de iniciativa.

Para hacerla necesitaremos:

• 125g de Harina
• 50g de tocino
• Pepperoni al gusto
• 100g de Mozzarella
• 2 cucharadas de Tomate Frito
• Orégano
• 1 cucharadita de Levadura Royal
• 100 ml de Agua
• Sal
• Aceite

Proceso

Lo primero es preparar la masa, para eso, en un bol colocaremos la harina, la levadura y una pizca de sal, mezclamos y hacemos un hueco en el centro donde verteremos el agua y un chorrito de aceite. Mezclamos perfectamente y amasamos sobre una superficie lisa con un poco de harina espolvoreada.

Cuando la masa ya no se pegue a nuestras manos y sea elástica, la haremos bola y dejaremos reposar, en un plato tapado con un paño de cocina, cerca de unos 10 minutos.

Pasado el tiempo, estiraremos la masa con las manos o con la ayuda de un rodillo, la idea es lograr un círculo un poco más grande que la circunferencia de la sartén que ocuparemos.

Luego colocamos un chorrito de aceite en la sartén y colocamos la masa, procurando que esta sobrepase un poco los bordes y que estos, queden más gruesos que el centro.

Ahora comenzaremos a añadir los ingredientes, comenzando por las cucharadas de tomate sobre toda la base y espolvoreamos un poco de orégano; luego cubrimos con queso mozzarella, le agregamos el tocino y el pepperoni, le ponemos un poco más de queso.

Cubrimos la sartén y dejamos cocinando a fuego medio durante 25 o 30 minutos, nos daremos cuenta cuando esté lista al ver la masa dorada de los bordes y el queso derretido.

Listo, tenemos una deliciosa pizza.